De Guillermo Rodríguez Bernal

sábado, 29 de agosto de 2015

Felicidades Papá.

Feliz 77 cumpleaños papá. Creo que no te felicitaba desde que te fuiste, hace ya 17 años. Todavía recuerdo aquel último cumpleaños que celebraste con nosotros, en el que nadie sabía lo que pedías al soplar las velas, pero que todos teníamos en mente el mismo deseo, seguir celebrándolo algún año más junto a ti.
Desde entonces todo ha cambiado mucho, mi querido amigo. La casa y mamá es lo que quizás se noten menos. La casa por el empeño de la Chari de dejarlo todo tal y como estaba, y ella pues viendo pasar los días y con los achaques propios de la edad, pero se mantiene bien, ha cambiado poco. Sus tristezas y sus pocas alegrías, pero tirando p’adelante como mejor puede. Tere sigue trabajando y no ha parado desde entonces. Aprobó sus oposiciones y te dio un nieto. Se llama Javi y es charlatán y dicharachero cuando se encuentra a gusto entre su gente. Te hubieras reído mucho con él. A mamá le recuerda mucho a ti cuando se cruza  de piernas al sentarse. Ahora tiene 11 años. Isabel y yo seguimos viviendo en el mismo piso, aquél al que te venías cuando estaba arreglándolo. Ya he tenido tres coches, el último comprado hace tres años. Ya sé que tú te apañaste con dos toda tu vida, pero ahora los jodíos duran muy poco y para arreglarlos hay que llevarlos a un taller con un buen equipo electrónico. Isa es mi hija y estoy muy seguro de cuanto hubieras disfrutado con ella. Es callada y reservada casi con todo el mundo, pero abre su corazón de par en par a todo el que quiere. Ahora tiene 15 años y anda un poco rebelde, pero mantiene ese fondo que tanto te hubiera gustado.
En nuestra barriada todo más o menos igual. Muchos han sido los que habrás visto pasar desde entonces, entre los que se encontraba Pepe “el portugués” que nos dejó hace unos años. Tu peña con un buen relevo generacional que la trae a los tiempos de ahora, sin olvidarse del pasado, han construido un acceso directo en la autovía y en las escalerillas han colocado un ascensor, por los viejos que se resisten a irse y que van al médico arriba, que lo pusieron donde estaban los colegios.
De Sevilla, Andalucía, España y el mundo, pues mejor no te cuento, no te voy a dar el día. En cierto modo, quizás está todo igual pero en versión del siglo XXI y con otros protagonistas, que tampoco creas que hemos evolucionado mucho. No hemos vuelto a ir a la Luna, ni siquiera acercarnos a ella, si te puede servir de ejemplo. Las personas cada vez hablan menos con los que tienen a su alrededor. Ahora lo hacen por ordenador o por teléfonos móviles, a los que con una pantalla de cristal y con sólo un dedo puedes hacer casi de todo.
Bueno, no te entretengo más que seguro que estarás muy liado por ahí arriba. Te enviamos muchos regalos en forma de amor de todos nosotros. Recibe miles de besos de mamá, de Tere, de Isabel, de tus nietos y míos. Espero que te sientas muy feliz, tan feliz como siempre te mereciste.
Te quiero mucho papá.

6 comentarios:

  1. Precioso Guille , me has dejado pensativa.

    ResponderEliminar
  2. Perdón por no entrar hasta hoy, Guillermo, todo un recital de lo que se lleva dentro y sobre todo de emotividad y cariño en el diáfano modo de trasmitirlo y conversar con ese ser tan grande y querido por tu parte. Un fuerte abrazo Willy.

    ResponderEliminar