De Guillermo Rodríguez Bernal

viernes, 30 de marzo de 2012

Hoy hace un año.

Hoy hace un año, que salí caminando de Hospital de Órbigo.

Hace un año, que vi desde el crucero de Santo Toribio la ciudad de Astorga.

Hace un año, que mandaba mensajes a casi todos los amigos peregrinos, anunciando que cumplimos con llegar.

Hace un año, que entramos en el último pueblo de la jornada, mirando atrás e imaginando todo el camino recorrido.

Hace un año, que callejeé hasta el centro, que vimos los maragatos en el ayuntamiento y que paramos a descansar junto a la catedral y al Gaudí.

Hace un año, que celebramos esa semana de caminar hacia Santiago con un buen Rioja y un cocido de aquellas tierras.

Hace un año, que plegué mi bastón, que cepillé el barro de mis botas y que deje de ver amaneceres caminando.

Hace un año, que reímos contando las anécdotas pasadas, las personas encontradas, los guisos y caldos engullidos, los ronquidos escuchados, las siestas dormidas, las ropas mal lavadas y los kilómetros recorridos.

Hace un año, que dejé de caminar para no volver más.

Hace un año, que soy peregrino en dique seco.

Astorga
Un año ya