De Guillermo Rodríguez Bernal

viernes, 27 de julio de 2012

Barcelona. Parque Güell, La Barceloneta y el arroz negro.

Turó de les tres Creus
Pues como escribía el gran Antonio y como luego cantó el gran Joan Manuel, “todo pasa y todo llega”. Después de un sábado inolvidable, llega la resaca de recuerdos al día siguiente. Además, domingo de partida para volver a casa. Como quedaba todavía tiempo para coger el avión, teníamos que aprovechar la mañana y un poco de la tarde para apurar al máximo estos tres agradables días con los amigos en Barcelona. Lo primero un buen desayuno, pensando en una pastelería-confitería que teníamos cerca. No queríamos repetir el mal trago del desayuno del día anterior.  Después,  arrancar con nuestra ruta de hoy.  Un autobús  nos dejaba en la parte más

martes, 24 de julio de 2012

Barcelona. Montserrat, El Modernismo y unos caracoles.

Estación de Plaza de España
Buen descanso en la Residencia “Erasmus” y mal desayuno servido en una cafetería cerca de la boca de metro de Lesseps, del barrio de Gracia. Allí tomaríamos el metro para enlazar en Plaza de España con los Ferrocatas. Fue el momento de esperar la llegada de nuestro tren, que nos servirá para acercarnos a los pies del monasterio de Montserrat. Durante el trayecto, acompañando al río Llobregat y el recuerdo, al pasar por Martorell, de aquella historia que nos contaba Armand sobre su Pont del Diable. Muy cerca pasamos de este precioso monumento, mientras nos relataba que una doncella vendió su alma al Diablo,  creyéndolo caballero,  si le hacía un puente en una sola

domingo, 22 de julio de 2012

Barcelona. Gracia, Rivera y El Gótico.

Paseando por Gracia
La estancia de mi buen amigo y peregrino Armand Arbós a Sevilla por unos días, provoco la promesa de devolver la visita a Barcelona a la menor oportunidad que tuviésemos y que se materializó en el mes de marzo de este 2012.
Antes de las diez de la mañana ya estábamos en el aeropuerto del Prat y, como si de “paparazzis” se trataran, nos esperaban a la salida nuestros amigos Armand y Charo, también buena amiga y peregrina de Valencia,  que aprovechó estos días para acompañarnos  el fin de semana.  Besos,  abrazos y