De Guillermo Rodríguez Bernal

domingo, 22 de marzo de 2015

La ciudad de Pontevedra.

La Peregrina
Iglesia de la Virgen Peregrina
En aquel lugar, donde las aguas del río Lérez pierden su dulzor para mezclarse con las saladas aguas de una de las Rías Baixas, encontrarás una de las ciudades españolas ideales para vivir: Pontevedra. Y fue la Rúa de Benito Corbal por la que me adentré aquel verano de 2005 para descubrirla. Nada más acertado, porque allí estaba para recibirme una de las joyas de la ciudad. La Iglesia de la Virgen Peregrina es pequeña, pero se nota nada más verla, el mimo y el gusto con el que fue construido este templo con forma de vieira. Punto de encuentro de peregrinos venidos de tierras lusas e inicio de mi ruta por esta gran ciudad.

domingo, 15 de marzo de 2015

Málaga. Alhaurín el Grande, Mijas, Alhaurín de la Torre, Cartama y unas papas.

Fuente del Acebuche
Fuente del Acebuche
La promesa de unas “papas empellás” hizo que se aprovechara un fin de semana para volver a Alhaurín El Grande. Atrás quedó aquél magnífico “Encuentro del Acebuche” donde buenos amigos, venidos de muchas partes, disfrutamos de toda esta sierra malagueña que nos cautivó. Días maravillosos donde el desfiladero de los Gaitanes nos cortaba la respiración, con su famoso “Caminito del Rey”, visto primero desde el Chorro y después caminando desde el embalse del Conde de Guadalhorce hasta llegar al otro lado de tan tremendo desfiladero. Días en los que conocimos las ruinas de Bobastro, aquel lugar donde un guerrero andalusí se reveló contra el emir de Córdoba, creando en aquellas lomas sus dominios. Y días en los que, como no, subimos a la sierra a conocer aquella fuente del Acebuche y después continuar hasta la “Nariz de Buey”, con las preciosas vistas del pueblo de Alhaurín, el valle en el que reina el río Guadalhorce y la sin par bahía de Málaga. Cuentan nuestras amigas alhaurinas, que arriba del todo, en los días despejados, se divisa hasta la costa del país vecino en continente africano.